El PSOE-A no sabe lo que es un funcionario público ni lo que es un enchufado de la "Administración paralela"
En el mes de abril de 2014, el SAF dirigió a la Presidenta de la Junta de Andalucía, Sra. Susana Díaz, un escrito reprendiéndola por la falta de conocimiento en el asunto de los trabajos relacionados con la revisión de las subvenciones de formación y además solicitándole la anulación de los posibles contratos del personal externo, ya que dicha facultad le corresponden por ley, al personal funcionario.(Ver en prensa)
La semana pasada el Secretario de Organización del PSOE-A, vuelve a demostrar el desconocimiento de las normas que regulan la administración autonómica al realizar nuevas declaraciones en el sentido de que: “el Gobierno de Andalucía había hecho un esfuerzo a contratar a “60 externos” para revisar más de 8.000 expedientes de cursos de formación.
Desde el SAF queremos informar a la opinión pública en general que el personal encargado de realizar dichos trabajos no puede ser ni personal contratado ni personal externo, deben ser personal funcionario, bien sean de carrera o interinos. Y a esta clase de funcionarios interinos pertenecen los 60 seleccionados, que de manera legal y procedente de la bolsa de interinos de la Administración General, han sido nombrados.
La revisión de los expedientes administrativos conlleva potestades públicas y por lo tanto y según la ley, le corresponden única y exclusivamente a los funcionarios públicos bien sean de carrera como interinos, cualquier otra modalidad sería ilegal por contravenir la ley. Estamos otra vez y es la segunda, ante unas declaraciones desafortunadas, desconocemos la intencionalidad de las mismas, no sabemos si para intentar confundir a la opinión publica, o simplemente se trate de desconocimiento por parte de los políticos andaluces del funcionamiento de la Administración Pública.
Los funcionarios públicos (interinos y de carrera) no se contratan, se nombran. Se rigen por el derecho administrativo y no por el derecho laboral. De hecho, para ser nombrados tienen que prometer o jurar la Constitución Española. Los verdaderos contratados externos, son los miles de enchufados de la administración paralela que pululan en las Agencias, Fundaciones, Consorcios, etc., que son elegidos a dedo.
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